Seguidores

domingo, 22 de noviembre de 2009

el castañar del tiemblo 21-11-09

EL CASTAÑAR DEL TIEMBLO
NRAIN-TRISQUI



Nuevamente me tengo que quitar el sombrero ante esta ruta, otra mas que me pierdo, y con esta van 4, 3 por un virus malo y esta por la rodilla, que espero no sea lo que pienso.


Un aplauso para el gran amigo cronista nrain y su compañero mariano.

track aqui, fotos aqui.

Como dije anteriormente lo que improvisamos sobre la marcha sale realmente bien y es el caso de la ruta de hoy.
Tras los mareantes cambios de planes del fin de semana que me hizo por pereza deshechar el Duratón mi primera opción era una rutilla larga por el Rio Moros, Trisqui tenía pensado ir de ruta al bonito pueblo abulense de Cebreros a lo que también estaba perezoso de ir para allá.

No sé porqué mi mente me dijo: "No vayas solo, vete con Trisqui" y así lo hice.

Quedamos a las 9:00 en Cebreros, de viaje recibo una llamada de Mariano que me dice que me espera en el restaurante el puerto para ir en caravana a Cebreros, posteriormente me vuelve a llamar para proponerme un cambio de planes:

¿Y si vamos al Castañar del Tiemblo?

Hay un dicho que reza ¿Dónde va la gente? Donde va Vicente y así es; medio foro últimamente ha visitado el Castañar y nosotros no íbamos a ser menos, es un paraiso por entorno y colorido además de ser una de las rutas favoritas de Mariano ¿se puede pedir algo más?

Llegamos a un aletargado pueblo de El Tiemblo con un día de seminiebla y temperatura fría non grata que contra mi voluntad me hace salir con la chaqueta puesta, cosa rara en mí que me acaloro en un par de pedaladas.

Rodamos en la bici hasta la entrada al Castañar donde unos pocos vehículos esperan para pasar por taquilla.

¿Nos harán pagar por entrar pedaleando?, la lógica nos dice que no, pero en estos tiempos de borágine y sinvergonzonería nada nos soprendería.

El guarda nos da paso y nos confirma que no hay que pagar con lo que comenzamos el ascenso por carretera con un desnivel que se acomoda en el 10%, !!!! bendito 10%!!!! quién lo pillara más adelante, desde aquí y hasta el kilómetro 12 casi nos podemos olvidar de los frenos, platos mediano y grande y los 6 piñones más pequeños, además de la chaqueta en mi caso.

No voy cómodo, el sillín se me baja y está inclinado para abajo y me voy cargando de patas y resbalo. Paradita a intentar solucionarlo y al ataque.

Mariano en el ascenso me va contando un poco cómo es la ruta, con toda sinceridad me comenta que habrá empujabike, rampones y alguna bajada que se antoja complicada...bajada bendita palabra también que habrá que borrar de nuestra mente durante un buen rato.

Abandonamos el aburrido asfalto e por una pista que sale a la izquierda y Mariano me anima diciendo que ahora empieza lo "bueno", subimos con peor pendiente y un 12% se acomoda en la pantalla del Garmin. Paramos entre otras cosas para que Mariano se despoje de la chaqueta y yo aprovecho para sacar las llaves allen y acabar una vez con todas el problema de la horizontalidad del sillín.




Ahora la subida empeora aún más si cabe, 14% de tierra y piedra, un Toyota LandCruiser nos rebasa sin dificultad alguna y esto sigue picando para arriba, el platillo ya es mi aliado aunque va contra mi religión meterlo tan pronto pero no puedo mover el mediano con dignidad.

Ahora la pista sigue con un depredador 22% de desnivel durante cosa de medio kilómetro que por culpa del firme nos hace poner pie a tierra, y esque ver a Mariano bajarse es desmoralizador, si no lo sube Mariano...efectivamente es un infierno, plato pequeño y piñón grande teniendo que reventar los pedales haciendo fuerza para movernos con un desarrollo tan insultantemente corto.



La pendiente nos da una tregua pero seguimos en no menos de un 16%, alcanzamos un pequeño abrevadero donde cato el agua de la zona mientras intento que mi corazón y pulmones vuelvan a su sitio, vemos que la pista asciende y !!!cómo asciende!!! aunque vemos la altura máxima cercana, o eso parecía desde donde estamos.





Coronamos en el collado de cuatro manos, donde nos deleitamos con el paisaje, Mariano me explica la zona, a un lado el Tiemblo se ve lejos y sobre todo bajíiiisimo al otro un pantano creo que del Burguillo,la vegetación que se aprecia es bonita y colorida pero de frente nos acongoja e impresiona otra buena subida, la Cabeza de la Parra, una pista asciende por ella y desde donde estamos es casi vertical.




A por ella Oeeee!!!!!!!! rodamos por la cuerda del collado con un aire fresquito que me hace arrebuscar los manguitos porque de la sudada tengo frío pero no tanto como para ponerme la chaqueta, más si cabe viendo la que se nos viene encima, las primeras rampas las emprendemos montados con el platillo y botando, el firme está suelto y hechamos pie a tierra en algún tramo porque los pasos se antojan complicados más si cabe complicándose aún más por la pendiente que en algún tramo roza el absurdo para la vida humana.



Habemus coronado cerro opuesto a la Cabeza la Parra!!!! y que fresquito, me pongo la chaqueta y Mariano me dice, ahora hay una bajada de las que te gustan...

Pocos metros nos separan del abismo que hemos de bajar, en los primeros metros algo no va bien, llevo el tren delatero muy bajo pareciendo que voy a trompicar para delante en un invertido circense, a Mariano le pasa lo mismo, llevamos las Revelation bajas para esa pendiente descendente así que saco la bomba y las taramos más duras, en ese momento se oye el rugir de motores, varias motos suben arrancando piedras y grava por la pendiente que para ellos es ascendentes me hace cagarme mentalmente en sus madres, sólo los salva un quad que los acompaña y nos pregunta si algún problema y que lleva herramientas, le comunicamos que no pasa nada y marcha, una moto al haberse parado el quad ya no puede subir, la piedra suelta y la pendiente la hacen derrapar yendo el piloto al suelo desesperándose bajo la mirada de Mariano y mía.

Esto marcha!!!! ya bajamos más seguros, sobre todo servidor con culo atrás aunque el terreno no tiene grip por mucho que la suspensiones aplastan las cubiertas, es arenilla muy machacada por las motos y la pista te marca la velocidad máxima a la que has de rodar, si es menos te caes y si es demasiada es imposible frenar la bici porque arrastra. La bici se cruza de lado a lado sin que la trasera Maxxis pueda hacer algo por remediarlo, sin embargo la Nevegal, mi santa Nevegal aguanta el tipo con su compañero el Hope que se encargan de bajarme hasta la mitad donde consigo derrapar para parar y fotografiar a Mariano que no viene.



Aparece Mariano a pata, la bici le va de lado a lado y prefirió bajar seguro aunque a pata también se las trae por la pendiente. Le animo y monta para bajar hasta mi posición, baja drifteando y comentamos la hazaña, parece que esas ruedas llevan mucha presión y no permiten al taco intentar moder el terreno, otro ajuste a tener en cuenta.



Afrontamos el último tramo de bajada el Pozo de la nieve se ve ya, Mariano busca trazada por el exterior del camino que parece que la vegetación hace que haya un poco más de grip, yo sin embargo sigo por la pista drifteando hasta que la pendiente amaina y suelto frenos volando sobre el terreno y rocas, algún salto que otro y mocos y lágrimas por la cara, que frio!!!

Veo a Mariano aún bajando y un dominguero acompañado de dos mujeres que le ven a pata les dice -Eso se baja montado...anda que... a lo que mientras yo aparcaba mi bici le digo ofreciéndosela -Inténtalo si quieres a ver que tal. El bocas ruborizado me dice que no, bueno...será difícil, tiene pinta de estar mal el terreno...quitandole hierro a su comentario desafortunado.




Sin embargo otro grupo de andarines me preguntan !!¿habéis venido de allí?!! señalando la cima, les decimos que sí y nos preguntan que si las bicis son de descenso jejeee.

Damos un pequeño rodeo para coger un sendero al Pozo de la Nieve. El Pozo es una edificación de piedra con un gran pozo excavado donde se hechaba la nieve de las colinas circundantes para conservarla y posteriormente venderla, hechamos unas fotos y vemos también el refugio donde para la próxima llevaremos la parrilla, chuletas y chorizillos...






Otra vez charlamos con los andarines de antes y Mariano les explica variantes de la zona, nos despedimos y continuamos la marcha.

Lo siguiente es un sendero muy técnico con pasos imposibles entre rocas que parecían duras en caso de caída, por lo que un ratito a pie de auténtico empujabike y otro montado, nos cruzamos con senderistas que nos dicen que el camino está muy malo...ya ves tú jjejeeeee.



El sendero va mejorando hasta enlazar largos tramos a toda leche entre árboles volando por las rocas hasta acabar en el Puerto de Casillas una piedra indica el valle de Iruelas donde nos hacen una fotillo.



Lo siguiente es una pistobajada que se agradece hasta el pueblecito de Casillas, la pista es rápida y Mariano está mosca con un ruido como de tope que le hace la bici, bajamos haciendo pruebas a ver si damos con ello.



Casillas es un pueblo que nos recibe con un partido de fútbol infantil con gran y vociferante público animando a los suyos, no sé como irían ni quien ganaría pero sus gritos nos amenizarían la subida, Mariano repone agua y preguntamos a un frutero donde se sale del pueblo para regresar al Tiemblo por el alto del Castañar, nos indica y este pueblo parece donde se inventaron las cuestas,salimos de él por una carretera flanqueada por castañas y hojas en el suelo, ascendemos por carretera que luego continuará en pista hasta un Collado en le Era del Corcho, nos esperan algo más de 200 metros de desnivel que para las patas son un suplicio que ameniza el paisaje y la tranquilidad, una bajada rápida y a seguir subiendo con la indicación de Mariano de preparar los hierros, un corto pero muy muy intenso repecho que intentamos hasta casi su final pero no podemos teniendo que bajarnos.










Ahora se acabó, ya queda bajar por una pista preciosa y de muy buen agarre amén de divertida, nos lo merecemos este final de ruta divertido, disfrutón y rápido.




La pista pasa a ocultarse bajo un manto de hojas que es toda una sorpresa ver que rocas y de que tamaño hay debajo cosa que la suspensión ayuda a descubrir.




Hacemos un desvío para ver el centenario o milenario, no sé, castaño llamado popularmente "El Abuelo", nos hacen una foto y continuamos el último tramo que es una pista en buen estado hasta el área recreativa que rebosa gentío pese al día nuboso.




Ya rodamos rápido por un hormigonado camino que nos dejará en la entrada del parque y al poco en los coches, otra gran ruta de la que los recuerdos te dejan una sensación de regusto y de cosas bien hechas.




Un saludo

No hay comentarios:

Publicar un comentario