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martes, 2 de julio de 2013

OTRO CLASICO!!.

LOZOYA-RASCAFRIA-CARRO DEL DIABLO EL PAULAR-LOZOYA


Hola amig@s,  otra ruta clásica en la Comunidad de Madrid es la que os presento hoy. Después de la visita anterior en la cuerda larga, no quisimos dejar de conocer algo mas de esta preciosa zona.
Nuestra jornada empieza en la localidad de Lozoya, bordeando el pantano en un agradable paseo en llano.


Con el embalse de Pinilla a sus pies y bajo el puerto de Navafría, la situación de Lozoya es difícil de superar. En el Valle Alto del Lozoya, en la Sierra Norte de Madrid, es famosa por su río, el Lozoya, que lleva abasteciendo a la ciudad de Madrid desde el siglo XIX, y cuya calidad de las aguas es cantada en obras de Benito Pérez Galdós.

El municipio está rodeado por los montes Carpetanos al norte y la Sierra de Canencia al sur, y su relieve es especialmente montañoso. Existe una única cuenca en el término municipal, la del río Lozoya, que a su paso por Lozoya está represado formando el embalse de Pinilla. En este embalse desembocan numerosos arroyos que discurren por el término municipal de Lozoya, como el del Villar o el de la Fuensanta. Este último nace en el monte del Reventón y discurre por el casco urbano tras nutrirse de las aguas de los arroyos de Navarejo y del Palomar que nacen en el monte del Reajo Alto. El territorio está cruzado por diferentes vías pecuarias, siendo la primera de éstas la Cañada de Gargantilla a Navarredonda.
Tras recorer unos 14 km llanos y con mucho encanto por las localidades que se visitan, Lozoya, Pinilla del Valle, Alameda del Valle, Oteruelo del Valle, Rascafria y el Paular.

 
 
De La localidad de Lozoya al Paular yo creo que se puede sacar una buena ruteja para los críos, con puntos de descanso y un continuo paso`por localidades para hidratarse y comer de mesa y mantel, también de pignic y bañador.
 

Llegamos a Rascafria, localidad donde realmente empieza esta jornada.... subir y subir en busca del Carro del Diablo....


La ruta propuesta hoy sigue el camino de aquellos carros hasta alcanzar al que se convirtió en rocas en mitad de la ladera que lleva al puerto del Reventón, no lo entendéis, verdad? ahora os cuento.

Arranca la ruta junto al polideportivo de Rascafría y cruza por una pista la amplia pradera situada a continuación. En la parte alta de la zona despejada se franquea una portilla, tras la cual se empalma con un amplio sendero que aquí mismo entra en el robledal de Los Horcajuelos.


A partir de este punto, el camino discurre perfectamente definido... siempre parriba....


...y asciende la ladera con un par de zigzagues...
 


San Lorenzo nos azota a base de bien, las gotas de sudor nos empapan y en cada revuelta buscamos el fresco del arroyo y las sombras.



Tras el último zigzag,  el camino gira a la izquierda, se acaba de cruzar el bosque de robles, atravesando otra cancela.

Ultimo zigzag y el valle de fondo.
 
Las vistas desde este punto son tremendas, dejandonos una bonita estampa del valle y la cuerda larga.
 
  
Atravesando otra cancela, concluimos la parte mas dura de la jornada de hoy. Menuda subidita, ya me me habían olvidado a mi este tipo de "repechos"... que bueno es recordarlos habiendo sufrido jijiji
 
 
Mientras bajamos, Peñalara nos va llamando en cada claro de los pinos, ofreciéndonos unas poses diferentes a las vistas desde otros puntos de la sierra .
 
 
Ahora la subida es mas agradecida y tras una "y" nosotros tiramos a la izquierda... ya era hora no? bajar toca!!
 

 
Y como es normal en nosotros, a la mínima nos paramos y aprovechamos las oportunidades... en este caso el momento barrita se ve regado por un refrescante baño de pies en agua... muy muy fresquita, y del bocata ni hablemos, sabe muuuucho mejor!!
 

 
Una vez hemos repuesto fuerzas, seguimos con la ruta y bajando, cada vez mas cerca del carro del diablo...eso si, entre pinos.
 
 
El camino marcha ahora por una loma mucho más despejada que abajo en el bosque. Poco a poco empiezan a aflorar bloques de rocas, en los que es fácil encontrar diferentes formas y figuras.


Un corto repecho concluye en una pista que cruza horizontal la ladera. Tomarla a mano derecha, Este, y seguirla durante unos treinta metros para descubrir abajo a la derecha y en mitad de los pinos un llamativo roquedo cuya silueta estilizada a muchos no les recordará la imagen de ningún carro.


Otros, como también se asegura, verán a una enorme tortuga, aunque justo al lado de la pista un pequeño amontonamiento de piedras sí que reproduce a la perfección las formas de un quelonio, a la que se le ha colocado una gran pelota sobre su caparazón. Habrá, por último, quienes sepan ver en el estilizado roquedo al infernal carromato.

Cuenta la leyenda que no está claro si fue por exceso de trabajo o porque le desbordó aquel encargo, pero el caso es que Juan Guas no podía cumplir con el compromiso de terminar la catedral de Segovia. Tanto se demoraba que le llegaron noticias del disgusto que cogió el mismísimo Carlos V. Agobiado, al arquitecto no se le ocurrió otra cosa que venderle su alma al diablo con tal de cumplir el último plazo.

Satanás no despreció el ofrecimiento y se metió en faena. De manera sobrenatural, no podía ser de otra forma, a partir de aquel momento el templo empezó a crecer a velocidad de vértigo. Y aunque sobrenatural, Lucifer, tuvo que recurrir a las terrenales canteras de Colmenar Viejo, conocidas por la calidad de su piedra.

Carro tras carro, cargados hasta los topes cruzaban la sierra por el puerto del Reventón, (pendiente nos queda, pero caerá en breve) el camino entonces más recorrido, para concluir el trato. La catedral tomó forma y sólo quedaba por concluir la segunda torre cuando, sintiéndose a salvo frente al emperador, Guas rompió el compromiso para salvarse también de Belcebú.

Se desconoce porqué el diablo no exigió a aquel hombre el cumplimiento del acuerdo, lo que asegura la leyenda es que agarró un cabreo tan monumental que él también deshizo el trato, convirtiendo en roca el último carro que llevaba el material a Segovia. De esta manera, una de las torres de la catedral segoviana tiene menor altura que la otra.


Cualquiera que conozca la Catedral de Segovia (La Dama de las catedrales, por su elegancia) alegará que solo tiene una torre, esbelta y altísima. Cierto, porque resulta que Juan Guas trabajó en la antigua catedral desaparecida hace siglos.

Esta antigua catedral estaba situada junto al Alcazar y fue escenario de grandes batallas en la Guerra de las Comunidades, incluso dentro de las naves, siendo practicamente destruida en 1520. La torre sirvió para que los Comuneros atacasen a las fuerzas realistas sitiadas en el Alcázar. Porque parece ser que solo existía una torre en aquella vieja catedral (tampoco hay que hacer demasiado caso a las leyendas)

De la antigua catedral solo se conserva el claustro, obra de Juan Guas, que fue desmontado piedra a piedra y trasladado a la actual Catedral de Segovia. Por supuesto, es espectacular y comparable al de San Juan de los Reyes en Toledo, obra del mismo autor.

Después de un poco de historia, la pista... pasa a formar parte del menú del día. El carro del Diablo a medida que subía por la pista fue soltando piedras piedritas y pedruscos, poniéndonos en compromiso por la velocidad alcanzada en la ensalada de piedros.


 Me llamo mucho la atención estos peazo pinos! La pista es rápida osea que cuidadin!


Poco mas abajo, es fácil pasarse el desvío por la velocidad a la que bajas, nos desviamos a la derecha bruscamente para enlazar por otra pista.


Creía que ya era to pabajo...pero alguna subidita nos quedaba. Peñalara atenta de nosotros no nos perdió de vista mientras nos castigaba "San Lorenzo"


 
Ahora si, algo mas suave la pista nos dejara en el desvío que nos dejara en uno de los sitios mas bonitos de la jornada de hoy.
 
 
SI, sin duda uno de los sitios que te regala una de las mejores vistas del Valle del Lozoya. Un sitio para pasar el día con los críos en un entorno increíble.
 

Monumento ala Guardería Forestal.

Con Peñalara de fondo!

Bonita panorámica del rincón que os perdéis si no lo visitáis.

Con el valle del Lozoya de fondo.
 
Después de recrearnos, relajarnos y fumarnos un piti en semejante entorno, proseguimos la ruta. Vamos en busca de los senderos de la Angostura. Para ello terminamos de bajar hasta la carretera que cruzamos, no tiene perdida... eso creía yo.
 

Aquí se ve la pista claramente...

Nuestra intención era subir hasta el puente por pista....

...y bajar por la otra parte del río, por los senderos, pero no fue posible ya que no encontramos el sendero "adecuado" que nos bajara. Tuvimos que desandar lo ya rodado e ir a lo fácil, ya que el tiempo de ruta se nos terminaba. Si os descargáis el track, ya esta depurado y sin errores.

Pendiente estábamos de lo que tenían pensado hacer los amigos de MTBLEGANES en la zona, ya que la ruta que tenían pensado hacer les llevaría hasta cotos y bajarían por sitios desconocidos para mi.

He de decir que lo que pude ver es la ostia, una zona increíble, bonita y muy disfrutona.
Tras desandar lo rodado, bajamos al margen del río por una trocha mu aparente...


 ...y SI, ahora SI, claramente se ve el camino a seguir.

 
El entorno es cojonudo, me recordó mucho a la Boca del Asno.
 


Una vez llegamos al final del camino, cruzamos un puente y a la derecha hay un oasis...


Nos tomamos un refrigerio y un cafelito comentando el tema de los senderos.
 
 
Intentamos seguir el track que teníamos y para ello tuvimos que maniobrar el estilo explorador para poder (ahora SI) rodar por un sendero chulo chulo y muy disfruton!!
 

Algún paso comprometido pero nada que no se pueda superar con algo de técnica.
 



Después de recrearnos bajando, llegamos a un puente que si lo coges a la derecha te sube a la cascada del purgatorio. Nosotros seguimos de frente en busca de las presillas y el Paular.


Las presillas, zona de disfrute y recreo inmejorable.

Llegamos al Puente del Perdon, donde nos afotamos. Ya solo quedan unos 14 km de llaneo.


Ya en el llaneo, pudimos ver cosas curiosas como la diversidad de piedras que hay en la zona.


Comentamos la ruta en un panel informativo y babeamos un poco con la ruta que nos habíamos metido entre pecho y espalda.


Enchufamos plato y apretamos los dientes para llegar a Lozoya a una hora prudente...las 9 de la noche jajaja es que no puede ser, nuestras rutas son de lo mas tranqui osea que si veis en los tracks tiempos desorbitados...no os estrañe, SOMOS ASÍ!!

Para terminar el día os dejo un bonito atardecer.

DATOS DEL TRACK

PARA BAJAR EL TRACK PINCHA AQUÍ

IBP 110








Bueno chicos, espero que os guste la bonita jornada de hoy, os recomiendo que la rodéis. Pendiente nos queda la subida al Reventón y esos senderos cachondos de la Angostura.
 
Cuidaros mucho!